10 mar 2013

Un puente para La Carballeda, 1910 (Actualizado)


Ya hablamos en una anterior entrada del trabajo que le costó a Puebla conseguir un puente tras las riada de 1909. Pues bien, en aquellas mismas fechas, Codesal y La Carballeda estaban empeñados en una campaña similar... sólo que "su" puente - reconozco que ésta es la primera referencia que tengo - parecía llevar bastante más tiempo derruido.


  "En la provincia de Zamora, partido judicial de Puebla de Sanabria, hay una comarca que se llama Carballeda. El pueblo más importante de ella, Codesal,es uno de esos burgos que casi no figuran en el mapa, y que, aislados del resto de la provincia y de toda la Nación, viven una vida vegetativa y monótona, y sólo saben del Estado y de sus obras, gracias al sorteo de quintos y a la visita del recaudador de contribuciones. Carballeda encuéntrase separada de todo camino vecinal por un río, bastante ancho, y famoso en la provincia por sus desbordamientos. Este río es el Tera. Desde hace muchísimo tiempo, los carballedinos vienen solicitando que el Estado construya un puente sobre el citado río, frontera de la abandonada comarca. Lo han pedido a diputados y senadores y periódicos. Han dicho a estos últimos, en conmovedoras cartas, escritas por algún médico ó algún sacerdote, que es inicuo se condene a miles de españoles a un aislamiento embrutecedor, ya que sólo la comunicación, el intercambio de ideas y productos, puede civilizar a estas regiones sin ventura, donde un ruralismo salvaje impide todo progreso y toda solidaridad beneficiosa. Nadie les escuchó. Si acaso, algún diario provinciano dedicó a sus quejas una gacetilla inútil. 
Llegaron las inundaciones. El Tera desbordóse, y las dos barcas de que servíanse ordinariamente los carballedinos fueron arrastradas muy lejos por sus aguas fangosas. Y cuando volvió la normalidad, y la inundación retiróse de los campos que cubriera de légamo, los habitantes de la aislada comarca se reunieron en la orilla del río y miraron con espanto a las tierras que se extendían tras aquel foso abierto entre ellos y España. Detrás no había un camino ni un sendero ni otra cosa que barrancos, matorrales y cerros. Delante estaba el río, ancho, rápido y profundo, ensoberbecido aún por su victoria sobre los diques naturales que fabricara en largos siglos de falsa mansedumbre. Ni puente ni barca. ¿Cómo pedir socorro? ¿Cómo decir al Gobierno, a España entera, que la inundación les había reducido a la miseria? Hicieron una balsa, y uno de ellos, el más atrevido o el más indignado, aventuróse sobre sus tablas y llegó a la otra orilla del río. Mientras volvía, algunos otros tantearon vados, plantaron estacas y emplearon los mismos medios que emplean los indios del Amazonas cuando se encuentran ante uno de los tributarios del río más grande del mundo y necesitan pasarlo para seguir su viaje. Si, amigos. Los carballedinos pueden haberse la ilusión de que viven en el corazón de la América española, o en las inmensas soledades de la Colombia británica. La civilización no ha llegado hasta ellos. Abandonados a sí mismos, han de oficiar de Robínsones en la isla. Sin embargo, figuran en el Censo y en el empadronamiento general, y contribuyen, sin enterarse probablemente, a la elección de un diputado provincial y de un mandatario con asiento en el Congreso.  [...]

Los carballedinos, en vista de que no les construyen un puente, ni les procuran barcas, ni les remedian en sus desgracias, pasan el río en balsas o por vados, pero no vuelven a la comarca donde  nacieron. Se van a América, y sus pueblecillos quedan desiertos. Como nadie les compra las casuchas, las cierran con llave y las abandonan. Dicen por ahí que ahora van a cambiar las cosas, que tenemos un Gobierno deseoso de hacer obras buenas y perdurables, que la España rural se regenerará gracias a las iniciativas de los que empuñan el timón de la nave patria. Pues oigan esos bien intencionados, si es que los menesteres electorales de estos días les dejan tiempo para ocuparse de cuestiones serias: en España hay muchas, muchísimas Carballedas. Son, en el mapa, como negros borrones indicadores de nuestra nacional incuria. Hay que incorporarlas al siglo por medio de caminos, puentes y líneas férreas. Hay que hacerlas salir de sus rincones y demostrarlas que el Estado es otra cosa que un gigantesco cilindro exprimidor de contribuyentes. Y luego hay que limpiarlas, con agua y con escuelas. Limpiarlas con amorosa adustez, con severidad misericordiosa, ocultando, tras el gesto duro, el corazón compasivo y blando. Caminos, agua y escuelas. Sin esas tres cosas, escalonadas por el orden en que escribo sus nombres, España seguirá siendo una inmensa Carballeda"
Fabián Vidal. La Correspondencia de España, 21 de Febrero de 1910
Esgrafiado Popular

Menos de dos meses después el columnista vuelve a ocuparse del asunto con ocasión de un telegrama enviado al Gobierno ("que, probablemente, no atenderá" - escribe) por la asamblea de alcaldes de la zona. En su artículo transcribe varios párrafos de una "larga epístola de un carballedino": 
 "«Esta comarca - me escribe mi amigo - era antes rica y próspera. No se conocía la emigración en ella. Había fábricas de blanqueo y elaboración de cera, manufacturas de tejido de lino, comercios importantes que hacían muchos negocios con las poblaciones portuguesas. Pero todo este bienestar desapareció en pocos años. El río Tera se ha convertido en nuestra ruina. Sus aguas se llevaron el puente construido sobre él hace varios siglos, y todos los pueblos de Carballeda quedaron casi aislados del resto del mundo. El aislamiento mató las industrias, hizo quebrar los comercios y obligó a los carballedinos a reconcentrar todos sus esfuerzos en la agricultura y la ganadería. Mas entonces surgió otro problema ¿Dónde serían vendidas las cosechas y las lanas? Para vadear el Tera es preciso recorrer 23 kilómetros de un camino casi intransitable. Ni una carretera, ni un ferrocarril atraviesan la región. Desde que las aguas se llevaron el puente millares de familias vegetan en la miseria, sin más relación con España que la visita del recaudador de tributos y las comunicaciones de la zona relativas al sorteo de los mozos. Sucede con gran frecuencia que el recaudador, en un pueblo, no puede cobrar, porque nadie tiene dinero. Presenta su recibo y quieren pagárselo con unas fanegas de centeno. Falta el numerario casi en absoluto. ¿Y cómo no va a faltar si no hay industria ni comercio por la carencia de vías de comunicación? 

Aquí, en los meses del invierno, las gentes se mueren sin asistencia facultativa, porque el médico más próximo está al otro lado del río y es imposible vadear éste cuando trae crecida. Aquí, el vecino que no amasa debe resignarse a la falta de pan en diez ó doce días, porque el panadero no se muestra propicio recorrer cinco leguas de pésimos senderos y a vadear después el río con peligro de su vida. Aquí, en los meses del invierno, ocho de cada año, no recibimos cartas ni periódicos durante semanas enteras y no nos enteramos, sino es por casualidad, de los cambios de política. Naturalmente, la miseria originada por la incomunicación en que vivimos obliga a emigrar a la juventud, que nos abandona en masa, dirigiéndose a los países americanos. Sólo van quedando los viejos y los niños, amén de las mujeres, y se morirían de hambre si no fuese porque de vez en cuando llegan a Zamora y a Puebla de Sanabria giros enviados por los emigrantes, que lejos de su patria encontraran pan y ambiente propicio para desarrollar sus iniciativas. 
 ¿Es que no somos españoles los carballedinos? ¿No damos nuestros hijos al Ejército y nuestras pobres cosechas al fisco que viene periódicamente a embargarnos, inexorable? Muy cerca de nosotros está la frontera. Y el Gobierno portugués atiende a los moradores de los pueblos suyos que junto a la misma se alzan, abriendo caminos, construyendo escuelas y procediendo de un modo que contrasta dolorosamente con la desidia de quienes desde Madrid dicen que administran a España.»"
La Correspondencia de España, 16 de Abril de 1910


Esta vez las reclamaciones no fueron atendidas, o al menos no como hubiesen querido los carballedinos: lo que llegó fue la construcción de los embalses de Agavanzal, Valparaíso y Cernadilla, cuya presa es hoy el único paso habilitado sobre el Tera desde Rionegro hasta Puebla. A cambio quedaron sumergidos Manzanal de Abajo, Anta de Tera, la mitad de Sandín y gran parte de los mejores terrenos de los pueblos ribereños.


Ps. Las vías de comunicación obsoletas han supuesto el estrangulamiento económico de distintos puntos de nuestras comarcas. ¿Otro ejemplo? Porto, naturalmente. Con respecto a La Carballeda recomiendo a los interesados el libro "Villardeciervos de la Carballeda (Zamora): 1642-1857". Elías Vega (natural de Villanueva de Valrojo) refleja los años de expansión de la comarca durante el S.XIX, cuando a la pre existente tradición arriera se sumó el ímpetu de los veteranos de la Guerra de Independencia para desarrollar un auténtico foco de negocios, a menudo basados en el contrabando con Portugal. Pero este periodo de expansión traía en su propio éxito el germen del posterior declive: los principales magnates abrieron sucursales en Madrid o en Galicia para dirigir sus operaciones; sus hijos ya establecieron su residencia en esas sucursales y en la época de sus nietos se había perdido todo contacto con el que había sido el orígen de su negocio.

Actualización (13/03/2013)


La Asociación Cultural Las Raíces de Codesal (¡más de 25 años funcionando!) ha publicado un artículo que profundiza significativamente en esta historia. Les recomiendo leerlo en este enlace.


47 comentarios:

  1. No somos rentables en este rincón del país.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No es rentable dotar de infraestructuras a los vecinos, Logio. Pero para construirnos presas, embalses, tendidos eléctricos, etc sí que contamos

      Eliminar
  2. Son extremecedores los dos textos que citas. Hasta qué punto han vivido abandonadas muchas áreas de nuestro país, qué vidas tan terribles debieron llevar sus habitantes, qué drama inmenso el de esa emigración para siempre. Un abrazo conmovido, querido amigo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un cierto nivel de emigración creo que siempre lo hubo: Krüger - uno de los primeros autores que estudió la sociedad de la comarca - decía que estas tierras duras daban para alimentar a un determinado número de familias; cuando ése número se alcanzaba empezaba la emigración. Pero durante mucho tiempo fueron en su mayoría movimientos temporales, incluso a veces la familia se quedaba en el pueblo mientras uno de sus miembros buscaba el jornal lejos.
      El problema de verdad empezó cuando "se cerraba la puerta para no volver"

      Un abrazo, Isabel

      Eliminar
  3. Hay que atender otras prioridades mas imperiosas,el bienestar de la gente es algo que los politicos no aprendieron,ni aprenderan...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Parece que a muchos políticos el bienestar de la gente sólo les interesa cuando redunda en su propio beneficio, J.M.

      Un abrazo

      Eliminar
  4. No se que es peor,si sufrir la presión de tantas vias o lineas de alta tensión sobre tu tierra o verte relegado al abandono por la pérdida de un puente.Muy doloroso habrá sido cerrar la puerta e irte o quedarte sabiendo que solo cuentas para los recaudadores.Esto es estar dejados de la mano de Dios y de los hombres que es más imperdonable.Cuan necesarios son los puentes.Los puentes de todo tipo....

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que cualquiera de las opciones es bastante mala. Otro ejemplo son las obras del AVE: ¿servirán de algo a la comarca? ¿o sólo pondremos el terreno para ver pasar los trenes desde detrás de la valla?

      Un abrazo, Inés

      Eliminar
  5. Siempre he oído a mi abuelo hablar de lo del puente, decían que se iba a hacer desde Codesal a Mombuey o Fresno, que en linea recta apenas habrá 2 o 3 kilómetros. Promesas incumplidas y uno mas de los vapuleos institucionales para con estas comarcas. Y a Zamora la siguen tratando como a una colonia, presas,parques eólicos etc. A cambio nulos puestos de trabajo,pueblos sumergidos bajo el agua,esquilmación de recursos,atentados paisajisticos...
    Es extremecedor el texto y ciertos parráfos siguen valiendo (salvando las distancias) para la situación actual de muchos pueblos.

    ResponderEliminar
  6. Respuestas
    1. Sí, historias comunes en nuestras comarcas: por eso también cito a Porto, que ya han perdido la cuenta de las veces que les han prometido la mejora de su (tremenda) carretera y hasta la apertura de una vía directa hasta El Puente de Sanabria (14 km en línea recta, unos 60 km por la carretera actual)
      Muy buena tu comparación con las colonias: sí, a veces lo parecemos.

      Abrazos

      Eliminar
    2. vuelvo a los dos textos para releerlos y disfrutarlos con más tranquilidad (qué gran hallazgo, gracias por compartirlos) y sí, totalmente de acuerdo con Javier: las cosas no han cambiado tanto!.
      Un saludo y, sobre todo, muchas gracias.

      Eliminar
    3. Sólo hay que mirar la evolución de los censos de los pueblos: un goteo continuo, parece sin final... algo más lento porque ya queda menos gente.
      Gracias, Desbrozador. Un abrazo

      Eliminar
  7. No es de extrañar que emigren los vecinos. Es una pena ver pueblos enteros abandonados a su suerte...Primero van con mentiras cuando les interesa y después un abandono absoluto, mientras los dineros se despilfarran que da gusto o se lo llevan.
    Mucho coraje tienen los carballedinos para subirse a esas balsas.
    Buen domingo.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ah, pero ahora sí se están haciendo grandes obras justo en la otra orilla del río. Claro que son para el AVE, no para mejorar la comunicación de los vecinos...

      Un abrazo, Laura

      Eliminar
  8. Estando en tierras olvidadas no he tenido ocasión de felicitarte por los cuatro años y lo hago ahora.
    Respecto a frases como: timón de la nave… y otras muchas, se utilizan para desajustar nuestra opinión. Si hacen un puente para gente que lo necesita solo aplauden los necesitados, sin embargo al cambiar el hecho por la frase “trabajaremos para solucionar las necesidades de los españoles” (además del ahorro del puente) los posibles aplausos se multiplican espléndidamente y así es como ellos entienden la política, por aplausos.
    Igual que han variado la opinión de lo público y nos cuentan que no es productivo, ¡si lo público siempre ha sido un gasto pagado por todos y por eso es público! ¡¡Coooooño!!.
    Bueno amigo ya sabes que me caliento y si me sofoco no están los tiempos para hacerlo público.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Casi todas esas frases se pueden resumir en una: "No he cumplido con mis promesas pero he cumplido con mi deber" No es extraño el calentón, lo raro es que tengamos momentos de enfriamiento.

      Un fuerte abrazo, Juno

      Pd. ¿Ya has empezado a escribir la historia? jejejejeje

      Eliminar
  9. Vaya vaya con los intrépidos recaudadores de contribuciones. Ellos llegan siempre, descuide. Pero lo demás, lo de dar algo a cambio de la contribución, eso ya es harina de otro costal.

    Feliz tarde de domingo

    Bisous

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ay, sí, Madame: El artículo es de primeros del S.XX, pero la imagen que tenía al leer lo de los recaudadores era la de las películas de Robin Hood. De las "levas" del servicio militar tampoco se olvidaban.

      Feliz semana, Madame

      Eliminar
  10. He estado mirando un poco la situación actual de Codesal, unos 120 habitantes hoy y en disminución, y da la impresión que olvidada aún hoy. Aunque parece que sin puente aún, cien años después, supongo que sí con teléfono e internet para la asociación cultural que he visto hay por allí, que ya es mérito para tan pequeña población. Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puente, no; teléfono e internet sí. Y sí, la Asociación Cultural Las Raíces, que ya ha cumplido ¡25 años! de actividad: un auténtico logro. Entre otras muchas cosas ellos pusieron en marcha el Museo Etnográfico que aparece en una de las fotos.
      Y Codesal ha sido también el hogar de d.Argimiro Crespo, toda una figura en el mundo del folclore zamorano - del que por cierto hace tiempo que no tengo noticias
      Un abrazo, dlt

      Eliminar
  11. Me llama la atención, y mucho, el término carballedinos, desconozco si nos intitulábamos así, o es que nos han puesto CARBALLESES desde fuera, lo cual tampoco sería de extrañar. Desconocía igualmente que hubiera existido un puente sobre el río Tera, y ruego si alguien quiere ilustrarme lo haga. Y por completar a mi amigo Javier, es cierto, Mombuey y Codesal, Codesal y Mombuey, lo han intentado, no una, si no dos o tres veces, o más. Hoy por el ayuntamiento de Mombuey aun ronda algún proyecto de puente costeado por los propios vecinos, que ciertamente, uniría Mombuey con Codesal o Cional, a través de Fresno, pero que como todos los intentos anteriores ha quedado en el olvido...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, a mí también me ha sorprendido mucho lo de "carballedinos", pero he querido respetar el gentilicio usado por el autor. Fabián Vidal fue un periodista muy influyente en su época: llegó a senador con la República y acabó muriendo en el exilio. No sé si durante mucho tiempo, pero seguro que tuvo contacto con los vecinos y quizás no sea un error.
      Yo del viejo puente tampoco tenía noticia: a ver si hay suerte y conseguimos algo más.

      Saludos, Francisco

      Eliminar
  12. Cierto es que siempre se ha oido "carballes/a" como gentilicio de la comarca. Hoy en día en Codesal, disponemos hasta de wi-fi, en el Bar Moby-Dick, e internet a través de Iberbanda en los domicilios particulares :-)

    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo es el que siempre he oído. Una de las familias más significativas de mi pueblo es precisamente la del Ti Carballés, que fue casi contemporáneo a estos dos artículos.
      Javier, a través de fb le he mandado a AC Las Raíces los facsímiles de estos dos artículos. Si te interesa tenerlos a ti también sólo tienes que pedírmelos.
      Saludos

      Eliminar
    2. Querido primo de allende el embalse, Celso también tiene ricos callos, morro, etc, jejeje. Respetaremos a don Fabián Vidal desde el desacuerdo pues. Aunque bien es posible que si tenía relación con la tierra, la tuviera desde la lejanía y como hijo o nieto de emigrantes, o incluso como cunero, lo cual parece también tradición de estas tierras. Xibeliuss si nos pasas a AC La Candonga los facsímiles nos hacemos también eco de ellos. Saludos a los dos

      Eliminar
  13. "Caminos, agua y escuelas" Por que siempre se le da mucho menos a los que se conforman con poco? Que pena me ha dado esa imagen de los que cerraban su casa con llave para no volver

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es una gran pregunta, Alma. Y quizás por su propia sencillez no obtiene respuesta. Como dice Juno más arriba parece que vende más el "hemos construído un areopuerto" que el "se ha hecho un puente que llevaban cien años demandando" En fin.
      Un abrazo, Alma

      Eliminar
  14. Es incompresible el estado de abandono y de marginación en el que han vivido determinadas regiones o zonas en un pasado no tan lejano, incluso muchas lo padecen en la actualidad. Cosas de la España profunda. Bastante fuerte los dos textos que nos traes, como dice Isabel. Buena semana, Xibeliuss.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que es un problema que no se ha querido/sabido afrontar. Y hoy la brecha entre el mundo rural y las ciudades sigue creciendo; aunque, por supuesto, las condiciones son muy distintas. Vete tú a saber. Igual es "ley de vida", como se decía antes.
      Un abrazo y buena semana, Paco

      Eliminar
  15. Nunca había oído hablar de Carballeda. Muchos pueblos hay abandonados a lo largo de toda la geografía y al final todos vivimos alienados fuera de nuestro entorno. No le veo fácil solución.
    Buen reportaje.
    Un abrazo y buena semana

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Katy.
      Abrazos y feliz semana también para ti.

      Eliminar
  16. Es más rentable el puente del AVE, "mecagüentó"
    Buen trabajo,amigo.

    ResponderEliminar
  17. Se me olvidó, que buenos recuerdos me trae la última foto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jjejeje ¿Se me ha visto mucho la intención con las dos entradas casi sincronizadas?

      Un abrazo, Tejón

      Eliminar
  18. Gracias!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar
  19. Excelente trabajo acompañadas de unas fantásticas tomas¡¡

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Cascarilleiro. Bienvenido a este rincón.
      Saludos

      Eliminar
  20. Hola Logio y seguimos igual.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un abrazo, Abi.

      Ya le daré recuerdos a Logio de tu parte :D :D :D

      Eliminar
  21. Hola Xibeliuss Jar:

    Soy un socio de la A.C Las Raíces de Codesal y creo que tenemos información adicional a la riada de 1.910, además de los artículos del sensibilizado periodista Fabián Vidal del diario La correspondencia añadimos otra serie de información relativa a la sobrecogedora riada que arrasó pueblos a lo largo del cauce del Tera y del posterior Proyecto de Ley del Plan General de carreteras de 1910, una que partiendo de Mombuey termine en Codesal, con Fresno como pueblo de paso.

    Este es el link donde lo hemos publicado. Adiccionalmente al final del documento encontraras otros link que reevian a nuestra web con otros documentos de apoyo utilizados.

    https://www.facebook.com/notes/codesal-asociaci%C3%B3n-cultural-las-ra%C3%ADces/un-puente-a-la-prosperidad/10151394507888929

    En pro de conocer un poco mejor nuestra historia para poder conocernos mejor a nosotros mismos.

    Un saludo,

    ResponderEliminar
  22. Indico otro artículo de un socio de la A.C. Las Raíces de Codesal, sobre cual pudo llegar a ser el trazado de la actual general, la cual pudo pasar por Codesal, Manzanal de Arriba, Robledo, Sandín ... hasta Puebla, en 1.854

    La carretera general , el puente a Mombuey y el presidente del Gobierno, Sagasta

    Este es el link de la publicación.
    https://www.facebook.com/notes/codesal-asociaci%C3%B3n-cultural-las-ra%C3%ADces/la-carretera-general-el-puente-a-mombuey-y-el-presidente-del-gobierno-sagasta/10151394339593929

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Magníficos los dos artículos. Recuerdo hablar con una anciana en Robledo que recordaba lo que le contaban sus mayores sobre los tiempos en los que el camino a Zamora pasaba por su pueblo (el trazado que aparece en uno de los artículos y que es similar al que luego llevó el ferrocarril) la "vida" que generaba y la sensación de abandono cuando se cambió la carretera.
      Pero después de leer los artículos me sigue quedando la duda sobre a qué puente se refería F. Vidal en sus artículos. Durante todo el S.XIX parece que no lo hubo y el puente de San Francisco en Puebla tampoco solucionaba la comunicación con Mombuey.

      Muchas gracias por la aportación. Siempre es complicado encontrar informaciones sobre estas comarcas y difundirlas para que los interesados tengan acceso a ella.

      Saludos

      Eliminar
  23. Tremendo!... leyendo he ido escuchando gritos que quedaron en el vacío. Es indignación y vergüenza dejar en el abandono más grande a Carballeda y todo por un mísero puente. Pues sí que tenía razón y la tiene, ¿No somos españoles los Carballedinos? ¿no damos nuestros hijos al ejercito y nuestras pobres cosechas, al fisco que vienen a embargarnos inexorable?...

    Hay tierras, pueblos que siempre pierden, que están en la última fila, ¿hasta cuando?.

    Un relato estremecedor, por lo que tiene de real.
    Un abrazo, Xibeliuss

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La provincia de Zamora entera sabe mucho de eso, Soledad. Incluso la propia capital fue la última en tener acceso por carretera. Pero, en fin: aquí seguimos, después de todo.
      Un abrazo

      Eliminar
  24. Hay que ver, enseguida lo reconocí, mi roble.
    Abrazos

    ResponderEliminar

Siéntase libre de comentar si es su deseo.
Las aportaciones son siempre bienvenidas, en ningún caso obligatorias.
Gracias