Robledo
Requejo
San Román
Remesal
Muelas de los Caballeros
Sotillo
Porto
El Puente
Manzanal de Arriba
Sejas de Sanabria
Val de Santa María
Cerdillo
Rozas
Villardeciervos
piedra seremos, noche sin banderas,
amor inmóvil, fulgor infinito,
luz de la eternidad, fuego enterrado,
orgullo condenado a su energía,
única estrella que nos pertenece.
Pablo Neruda
Piedras en los caminos: en el de Portugal, en el de Santiago, en de La Bañeza, en el de Trevinca, en el de Zamora, en los del Contrabando, en el gran cruce de caminos...
ResponderEliminarprecioso, monsieur! Que oportuno el poema de Neruda que acudió a su mente, y que bello homenaje a esas piedras amadas, milenarias, que contemplaron tantas generaciones y ahi seguiran cuando nosotros ya no estemos.
ResponderEliminarFeliz domingo
Bisous
Siempre habrá una piedra en la que tropezar, ja, ja.
ResponderEliminarPiedras salvajes y piedras domesticadas... ahí seguirán, hasta que otros vengan a interpretarlas como nosotros.
ResponderEliminarFeliz domingo, Madame
Ya sabes, Logio: Una piedra en el camino me enseño que mi destino... ;-)
ResponderEliminarHablan por si solas.. son grandes y pequeñas joyas por las historias que puedan haber tras de ellas. Me imagino a las mujeres lavando la ropa en la primera foto. Preciosas todas!!
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas historias: el pozo de Sejas, la orden de San Juan en Val de Santa María, los pisones en Sotillo... sí, las lavanderas en Robledo, en el camino original hacia Aliste y Zamora.
ResponderEliminarUn abrazo, Arena ¿qué tal el cuadrado amarillo?
Qué formas tan hermosas, siendo sólo piedras.
ResponderEliminarLa belleza de tu tierra es increíble.
Ojalá pudiera visitarla algún día.
Muchos besos y abrazos.
Si las piedras hablasen... De algún modo tu mirada les da voz. Cuentan nostalgias de musgo, riachuelo, ruina, cantero, tabla y jabón. Qué maravilla de fotos, Xibeliuss! No me canso de mirarlas.
ResponderEliminarA partir de ahora una piedra en el camino ya nunca será un obstáculo sino un regalo bello y mudo.
Abrazos
será por piedras!! he disfrutado mucho con tu paseo y cuando ya echaba de menos la nieve la encontré en tu penultima foto, bueno y en entradas anteriores. te dejo un abrazo y gracias por tus visitas y por comentarme.
ResponderEliminarY pensar que mucha gente no presta atención a estas maravillosas piedras.
ResponderEliminarUn saludo.
Aquí te espero, carolina, por si necesitas un guía.
ResponderEliminarUn abrazo.
siempre me han atraído las piedras -que tontería, no?- por esa eternidad que suponen, frente a lo efímero de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo, alicia
Bienvenido, Ripley. Y gracias a ti, por la visita y por tu gran blog.
ResponderEliminarBienvenido, tejón. ¡Ellos se lo pierden!
ResponderEliminarQue no se sientan las piedras eternas...
ResponderEliminarQue hasta las piedras pierden la dureza
cuando el martillo golpea con fuerza.
La piedra que no es bien dura se quiebra.
La piedra que no es bien dura se quiebra.
(N.T.C.)
Saludos.
Varo.
¡Saludos, Varo! Te prodigas poco ultimamente, se te echa de menos.
ResponderEliminarCertero, como siempre.
SOY UNA AMANTE DE LAS PIEDRAS, PIENSO QUE TIENEN MUCHA VIDA, AUNQUE NO LO CREAS. TU FOTOGRAFÍA CONSTATA LO QUE DIGO.
ResponderEliminarPERDÓN A TODOS SI OFENDO, PERO ES QUE NO ME LO PUEDO CALLAR, NO PARECE EN LA FOTO DE ROZAS QUE LA PIEDRA ES UN PENE, BUENO EL GLANDE?
LO SIENTOOOO.
Pues si una bonita recolección de piedras...
ResponderEliminarJjejejej, cría que nadie se iba a dar cuenta!
ResponderEliminarUn abrazo, Reme
¡Como para llevarlas en un cesto!
ResponderEliminarSaludos, José Luis
Por aquí también nos tienen rodeados. De hecho estamos asentados sobre dura piedra granítica, nos arropan por las noches cuando viene el helado viento nevado de la sierra, se alzan en nuestros paisajes, levantamos nuestras construcciones con ellas, las utilizamos para poder pasar de un lado a otro del río en forma de puente, para encender fuego, moler el grano y arar,... Y luego dicen que están muertas. Yo no creo que lo estén tanto.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Xibelius, muy original esta selección de piedras, que sin tener nada entre si, tu las has enlazado de buena manera creando una serie estupenda y rematada por un texto de Neruda.
ResponderEliminarUn abrazo
el lio de Abi
¡Muertas? Viven más despacio, que es distinto. Un abrazo, Carmen
ResponderEliminarBienvenido, Abi. He buscado piedras trabajadas y piedras "silvestres", en puntos distintos de esta tierra. Aunque lo cierto es que primero fue el poema y luego busqué la ilustración.
ResponderEliminarSaludos.
Impresionantes las imágenes. Nos dicen tanto las piedras... que pena que la mayoría de las veces no sepamos entenderlas.
ResponderEliminarComo siempre, sobresaliente en imágenes.
Un abrazo
Sí,es muy curioso. Por ejemplo, los grabados en la piedra en la fuente de Muelas. Hay quien dice que indicaban la potabilidad (o no) del agua. ¿Quien lo sabe hoy de cierto?
ResponderEliminarUn abrazo, verdial